A veces sueño que desaparece el lenguaje. 

Mi boca es un depósito de tanques de guerra

y los hermosísimos soldados 

abandonan la primera línea del paladar. 

A veces sueño que el lenguaje huye, 

una avería del corazón, el tumor pequeño

que al microscopio revela su caligrafía muda. 

A veces sueño una lengua sin frases, 

un accidente cardiovascular léxico,

letras que se despegan de la hoja

como patas torcidas, rebobinadas sin tino.   

No sé por qué temo morir 

y que en mi cuerpo desvanecido alguien lea: 

“ausencia de palabra”. 

Por qué tanto recelo a la autopsia

de una vida sin idiomas. El mundo 

sin su raquítica discusión de vocablos, 

mutantes administradores del hueco. 

Si no hay lenguaje, ¿qué duele?  

La lengua sin boca sorprende en los otros,

La boca sin lengua sorprende en mi cara.

No deseo las palabras sino su contrario, 

persigo sin cansancio lo que no puedo decir. 

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Sonia Betancort ha publicado siete libros de poesía. Doctora en Literatura por la Universidad de Salamanca, en la actualidad es profesora de Literatura en la Universidad Camilo José Cela (Madrid). Centra su obra crítica en la narrativa y en la poesía española e hispanoamericana contemporáneas.