Este número se estrena con el mes, el día primero. Y marzo de cada año es el Mes de la Mujer, durante el cual diversas naciones del mundo se abocan a destacar y conmemorar los logros y contribuciones de las mujeres a lo largo de la historia. Tras las siete iniciales salidas del sol, el almanaque arribará al 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, día que, bajo el lema “Para TODAS las mujeres y niñas: Derechos. Igualdad. Empoderamiento”, apuesta por el empoderamiento de la próxima generación […], ya que la juventud, en especial las mujeres jóvenes y las niñas adolescentes, serán las protagonistas de cambios duraderos en el futuro, señala Naciones Unidas.
Ningún tiempo mejor para dedicar nuestro dossier a una mujer de letras como Emelda Ramos: poeta, narradora, investigadora, ensayista y educadora nacida en 1948 en Salcedo (hoy provincia Hermanas Mirabal). Ella recibió el Reconocimiento Anticanon a la Trayectoria de la Mujer Literata 2024, galardón creado por el Proyecto Anticanon en 2022 con el objetivo de destacar los invaluables aportes de las escritoras dominicanas contemporáneas a la literatura y la cultura, y con el cual busca preservar el legado de las autoras como un componente esencial de nuestra identidad caribeña, según define su propósito. Ocho distintos enfoques a Emelda Ramos y a su obra preparados para esa distinción componen el dossier.
Así, por ejemplo, Arlene Sabaris describe que leer a Emelda es embarcarse en un viaje emocionante a nuestra identidad resaltando en su literatura los valores anticanónicos de la construcción de la identidad y el sentido de pertenencia, en tanto que Ángela Suazo resalta que la suya es una voz que reivindica lo criollo y profundamente dominicano, desafiando lo establecido. Amarilis Cueto ve en su obra valores anticanónicos, pues desde siempre ella ha sido una defensora de los derechos de la mujer y este aspecto resalta en sus narraciones, mientras que Denisse Español destaca en los libros de Emelda algo que viene observando en textos escritos por mujeres, en los que la osadía o valentía resulta ser un valor unificador y común.
Por otro lado, a Lauristely Peña Solano no le sorprende que Emelda incursione en la literatura infanto-juvenil, pues ingenio y diversión (características de la Emelda-persona) son elementos esenciales en la escritura de textos de aventuras para el público más delicado y exigente que existe; al mismo tiempo, para Michelle Ricardo, el primer valor anticanónico de Emelda es ser una escritora fuera del centro, “porque tuvo que esforzarse el doble, el triple o de manera inconmensurable para trascender como escritora”. Finalmente, Patricia Minalla nos recuerda que Emelda en sus libros de no-ficción no se conforma con contar anécdotas y detalles biográficos, sino que “cumple un objetivo mayor, que es el de dar muestra de las producciones de las figuras analizadas, haciendo una apreciación consciente de sus contribuciones a la cultura de su pueblo y del país”.
Otro festejo de nuestras letras es el otorgamiento del Premio Nacional de Literatura 2025 al dramaturgo, ensayista, poeta, publicista y (sobre todo) narrador Efraim Castillo. “Narrando –confiesa él en su discurso de recibimiento, reproducido aquí–, me transformaba en otro, en el sujeto de lo narrado y podía combatir las injusticias del mundo, porque sospechaba que el país estaba plagado, tal como hoy, no sólo de injusticias, sino de prepotencias, de presunciones, de odios y crímenes. Para mí, narrar era ser libre, ser héroe y antihéroe”. Un gran escritor nuestro que alcanza un merecidísimo reconocimiento por su trayectoria literaria y vital.
Ariosto Antonio D’Meza continúa aportando al análisis novedoso e integral de la escritura de Franz Kafka. Sondea, en esta ocasión, las profundidades de El Proceso, con lo cual conmemoramos el centenario de la publicación de esta novela tan influyente y significativa, llevada a imprenta por su amigo Max Brod, desobedeciendo con ello el último deseo de Kafka. A cien años de su publicación, recuerda D’Meza, El Proceso sigue resonando por su profundidad y ambigüedad, invitando a múltiples interpretaciones.
Igual de paradójico, como el de Joseph K., sería el proceso judicial que emprendería el Gobierno militar de intervención norteamericana contra el poeta dominicano Fabio Fiallo en 1920. Eso revela un documento desconocido en el país, localizado en los Archivos Nacionales de Washington, DC. por Juan Manuel Prida Busto, y publicado por primera vez aquí.
Entre las prácticas editoriales de Plenamar resalta la de servir de escenario tanto a figuras reconocidas como a escritores noveles, y el número de marzo no ha sido la excepción. Por eso trae un ensayo de la dominicana Mildileidy Solano y poemas del venezolano Ender Rodríguez –ambos escritores muy jóvenes–, junto a textos del poeta, teórico, editor, y profesor de literatura estadounidense Charles Bernstein, uno de los más prominentes miembros de los L=A=N=G=U=A=G=E Poets (Poetas del Lenguaje), y quien fuera reconocido este 2025 con el America Award for a lifetime contribution to international writing (Premio América por la contribución de toda una vida a la escritura internacional) el cual, otorgado desde 1994, ha recaído antes en figuras tan impresionantes como Aimé Césaire, Peter Handke, José Saramago, Haruki Murakami o Mario Vargas Llosa. La selección y traducción de dichos textos pertenecen al poeta chileno Enrique Winter.
Naveguemos, pues, por la plena mar de las palabras.